Die Schönste Krankheit des Weltalles

Mr. Murphy Says It Better

Acknowledgements

martes, 30 de junio de 2009

Involution Required

Recientemente escuché Battle for the Sun, el nuevo álbum de Placebo, y me cuesta muchísimo trabajo creer que el esta banda de hoy en día haya grabado alguna vez el maravilloso Without You I'm Nothing (1998) y el soberbio Black Market Music (2000). A mi parecer es el disco más comercial que ha editado hasta el momento--incluso mucho más que Sleeping With Ghosts y Meds juntos. Brian Molko ya había anunciado que el nuevo sonido tendría tintes más optimistas, y hasta feliz, y que sería un buen cambio para su carrera, de acuerdo a sus palabras. Lamentablemente el nuevo estilo no logró convencerme del todo. No conozco mucho sobre el nuevo baterista pero sigo prefiriendo a Steve Hewitt (a parte de que no tenía demasiados tatuajes a la vista), pues su estilo me parecía muy particular. La lírica también sufrió un cambio bastante radical, pues perdió sus dosis de profundidad y humor negro. Ya no tenemos las estrofas desgarrantes de "Without You I'm Nothing" ni el sarcasmo melancólico de "Narcoleptic" o "Peeping Tom", dos de las canciones por las cuales creo que Black Market Music sigue y seguirá siendo el mejor disco de su carrera.

Estoy de acuerdo que un artista debe buscar nuevas formas para evolucionar, experimentar con nuevos estilos para poder crecer, pero simplemente pienso que recurrir a las tendencias más comerciales no es la mejor forma de hacerlo. Incluso Meds contiene tracks que lograron dejarme pasmado. Noté varias diferencias en los arreglos y en la instrumentación, pero la esencia principal de la banda lograba permanecer. Ya fuera melancolía desoladora o esa clase de melancolía que, a pesar de todo, te impulsaba a seguir, esa sensación estaba presente. La pesadez en "Space Monkey" en conjunción con el cuarteto de cuerdas fue apantalladora. La atmósfera en "Follow the Cops Back Home" se convertía en la mejor para un paseo en un día nublado. La pasividad masoquista de "Pierrot the Clown" transmitía sentimientos de apego a alguien. La fragmentación rítmica de "One of a Kind" demostró que diferentes notas pueden convivir en una sola canción que, junto con una letra llena de contradicciones, convierte el aislamiento en una bendición (más vale ser diferente y estar solo que tener que como el resto para estar "acompañado"). "In the Cold Light of Morning" nos hace recordar aquél terrible vacío que produce el after hours de un concierto magnífico o de una gran fiesta después de mucho tiempo. Hace tres años Molko y compañía lograron todo ésto, a pesar de su afianzamiento con la comercialización masiva. Hoy queda muy poco de éso. Si bien no quisieron repetirse, tampoco significa que vayan por el mejor de los caminos. Este nuevo estilo happy no encaja con ellos. La melancolía fue borrada y dio lugar a una nueva apariencia que no propone un cambio revolucionario, sólo de humor. Incluso hay coros en cantados en español (tal vez el novio de Stefan sea el culpable de ésto) y no sé si interpretarlo como una estrategia para acercarse, aún más, a su público hispanohablante. Mis músicos favoritos no tienen por qué tomarse la molestia en aprender español para quedar bien conmigo, sólo tienen que hacer buena música. Jamás he estado en contra de la experimentación estilística, pero parece que Placebo se emocionó demasiado con ella. Por desgracia no obtuvieron resultados convincentes. Su nueva actitud happy, happy, joy, joy me parece algo negativa y, no me sorprendería que decideran cerrar el festival "Muere Ladino" del próximo año.

Quizá los fans más jóvenes reciban Battle for the Sun con los brazos abiertos. Me he topado con miles de posts en Youtube diciendo que éste es el mejor disco de su carrera. Muchas revistas especializadas concuerdan con dicha opinión pero simplemente no me gustó el nuevo álbum, ni siquiera para descargarlo ilegalmente. Quizá sea un poco pesimista y ellos mismos se den cuenta, pero ya no le auguro muchos años la banda, lo cual me entristece. Tampoco soy de la opinión de que deberían repetir un nuevo Black Market Music, pero deberían intentar hacer un disco que lo superara de una forma distinta. Insisto, cuando usaban vestidos hacían música de mejor calidad.

Pero por haber creado Without You I'm Nothing y Black Market Music les guardaré respeto.

jueves, 25 de junio de 2009

End

En The History Boys, Alan Bennett dijo que "pop culture is the new literacy". Todos sabemos que la cultura y el zeitgeist son representados por numerosos elementos que, después de cierto tiempo, se convierten en símbolos de una era, pueden ser objetos, libros, canciones, frases, etc. Los personajes famosos también se convierten en símbolos gracias a sus logros pero, desafortunadamente, también son humanos. En menos de veinticuatro horas dos íconos de la cultura pop, Farrah Fawcett y Michael Jackson, representantes vivos de los 70s y 80s respectivamente, murieron por diferencia de horas. Los logros de cada uno ya son conocidos por todo el mundo, así que ya no es necesario resumirlos. Lo alarmante de ambos decesos es el hecho de que, si los íconos vivientes de dos eras desaparecen, ¿qué quedará? Es obvio que dichas eras han llegado a su fin, aún si la memoria de dichos personajes prevalecerá. Hay quienes creen que, cuando una superestrella muere no tardará en volverse leyenda, pero eso no cambiará el hecho de que nos estamos quedando sin íconos. Si nos quedamos sin íconos no sé que sucederá después. Tal vez serán sustituídos por unos nuevos que muy probablemente sólo duren quince minutos. Pero, hasta donde sé, nunca habían muerto dos personajes en un mismo día. Creo que esto es un mal presagio para la cultura y la educación pop, pues ya no existen dos de sus elementos básicos.

martes, 23 de junio de 2009

Diagnostic of Chances

Alguna vez escuché que los guionistas de House eran filósofos. Nunca me he interesado por la filosofía, pues jamás logro comprenderla y, por lo tanto, me aburre. Pienso en los filósofos como personas taciturnas y ensimismadas que sólo se dedican a formular teorías que jamás se atreverían a poner en práctica. Por eso prefiero la literatura, pues son los escritores y poetas los que se atreven a hacer el trabajo sucio que los filósofos se niegan rotundamente a llevar a cabo: darle un fin práctico a todos sus conocimientos y sabiduría almacenados. (Quizá mi opinión sobre algunos de ellos tenga que ver con el hecho de que, hace poco más de un año, me topé con un estudiante de filosofía en mi clase del cele. El tipo, cuyo nombre jamás supe, correspondía al cliché que todo wannabe de Nietzsche poseía: pésima actitud--incluso peor que la mía en aquellos días--ante la vida, descuidado y desinteresado por su alrededor. Parecía que odiaba a todos y también al mundo y, como era cosa de tiempo, dejó de asistir a las clases y no volvió. Nadie lo extrañó).

Sin embargo, los guionistas-filósofos de House no sólo han logrado hacer algo remunerable con su profesión, sino que han logrado transmitir esas ideas masivamente. Aquél junkie misántropo y sarcástico tiene un enorme contexto que no se puede digerir fácilmente y, por lo tanto, existe una sensación de amor-odio respecto a él. Resulta casi imposible creer cómo una persona que odia al mundo y todo lo que hay en él pueda salvarle la vida a alguien. Su humor negro produce gags y juegos de palabras bastante ocurrentes pero, en ocasiones, puede resultar muy sádico y enfermizo. Su caracterización es tan compleja que no es fácil de aceptar. En muchas series de médicos los protagonistas son bastante predecibles: amables, humanitarios y, si uno de sus pacientes llega a morir, su corazón se rompe y todos lloran. A House no le importan las personas, sólo le importa alimentar su ego resolviendo casos que otros médicos desecharían. Ya lo dijo él en los primeros capítulos: "¿Qué prefieres: un médico que sostenga tu mano mientras mueres, o uno que te ignore mientras te salva la vida?" En este sentido, la bondad y la compasión por el prójimo son fútiles, pues demostró que, por medio de dos paradojas, sólo porque se es más humano no significa que se sea más efectivo. Si bien salva vidas sus métodos son cualquier cosa, menos ortodoxos. Envía emisarios a allanar las casas de los pacientes. Siente Schadenfroh por los enfermos y no se arrepiente de ello. Algunos de sus interrogatorios harían ver a la Santa Inquisición como Hermanas de la Caridad, por medio de los cuales no sólo logra descubrir la causa de las enfermedades, sino que, no pocas veces, desnuda el alma de las personas y las deja vulnerables no sólo ante sí mismas, sino ante sus seres más cercanos. La verdad puede salvar vidas, pero también puede acarrear vergüenza y humillación. La verdad redime y condena simultáneamente. Sólo porque House le salve la vida a alguien no significa que quede completamente ileso.

Cuando de religión se trata House es mucho más sarcástico. Si descubre que el paciente cree en la divinidad, no dejará de burlarse y hacer comentarios irónicos sobre Dios, demostrando así su ateísmo incurable y, más enfermizamente, crear dudas existenciales y, si éstas ya existen, las vuelve más complicadas. Hace poco vi el épisodio en el que está tratando de curar a un sacerdote alcohólico que sufre alucinaciones y que ha perdido la fe en Dios. En su búsqueda de la verdad House sacó a relucir aspectos desagradables del paciente, todo con el fin de encontrar la razón del mal para salvarle la vida. Podría decirse que estar bajo el cuidado de House es una clase de purgatorio en el cual los pacientes sufren dolor y humillación y, una vez que han expiado todos sus pecados, alcanzan la "salvación". Nada en la vida es gratis, y la salvación no es la excepción, uno tiene que dar algo a cambio, aunque no exactamente del mismo valor, para obtenerla.

En la mente de House las coincidencias no existen y nada es accidental. Dicha creencia va en contra de mi visión del mundo. Estoy de acuerdo que todas las enfermedades, sin importar qué tan graves puedan ser, tienen una causa lógica. Si nada es accidental entonces todo tiene sentido, pero ¿qué sucede con la existencia humana? Nadie ha podido responder la típica pregunta de "¿por qué estamos aquí?" House es el menos apto para hacerlo, pues está fuera del control de cualquier ser humano. Las cosas que suceden en la vida, como ya lo he dicho antes, son sólo coincidencias y accidentes (sin importar qué término suena más bonito). Pero los guionistas de la serie saben que House jamás intentaría responder dicho cuestionamiento, pues no es su trabajo. Es la serie misma quien podría hacer una propuesta. El padre enfermo menciona que escuchó decir a alguien que las coincidencias son el medio por el cual Dios trabaja desde el anonimato (obviamente House replicó con su sarcasmo habitual). Esta vez la paradoja no vino de House, sino de los creadores que recopilan información y conocimientos del exterior. Cuando Dios forma parte de las paradojas, éstas se vuelven más complejas: si las coincidencias son uno de los medios por los que Dios trabaja, entonces sí tienen sentido, y ya no son coincidencias. El contenido de House no sólo aborda la filosofía, también la semántica.

Mi visión de la vida basada en accidentes y coincidencias no ha cambiado, pero la idea de que Dios esté detrás de ellas con un propósito determinado me parece muy interesante. Dicha teoría provino de la filosofía puesta en práctica. Me alegra ver que algunos filósofos sí tuvieron el valor de hacer algo con sus conocimientos y sabiduría almacenados.

viernes, 19 de junio de 2009

Rain

Today I see everything behind the gray shades of time and I can't believe how different they look. The rain falls on my head but I don't mind as I run in it, watching everything pass by. Sometimes I can't help but looking back, but I can find neither something joyous nor tearful, only confusion due to the last events that took place in those old rainy days. Why do I do this I don´t know. The cold shower seems to ease my heart and it works for a while. I don't mind the pain of the last year anymore. I have discovered it wasn't important after all for it had no superior purpose to be. Time has drowned the sorrow away and its meaning along. Everything that happens is but a slip that just keeps going but never comes in the same shape. I learned this as I saw the flames being drenched and the embers floating away, while every image and glance around me tried to ignite the last remnants of a craving that didn't last long enough so that the aftermath caused more sadness. Everything just flowed away and I don't know what became of it. Memories dissolve in the rain and only a few debris rise to the surface and, after the droplets fall upon them, they finally disappear. Nobody knows where those memories go when they die but, all in all, it makes no difference. Time and rain slowly fade them away, effacing any trace of their existence in life.

jueves, 11 de junio de 2009

Homegrave

Los lingüistas han descubierto que los acentos estándares le otorgan numerosas ventajas a los hablantes. Con acentos estándares me refiero a aquellos que han sido institucionalizados por las escuelas de idiomas en todo el mundo (ya sea la variante RP en Europa respecto al inglés o la estándar en América; en cuanto al alemán se enseña la variante "Hochdeutsch"). Parece que el verdadero motivo de dichas variantes se relaciona con el prestigio que éstas adquieren. Según diversos estudios, los británicos con diversos acentos prefieren la pronunciación RP sobre los que ellos emplean en la vida diaria, sin importar su ciudad de procedencia. De ahí que los lingüistas concluyan que existe un desprecio inherente hacia el lado vernacular de la lengua. Las variantes RP y Hochdeutsch implican una educación de nivel superior y, por lo tanto, son más agradables al oído. En las escuelas finas de Gran Bretaña los profesores se encargan de borrar cualquier tipo de acento que los estudiantes pudieran emplear (no estoy muy seguro respecto a los colegios en Alemania, pero el Hochdeutsch se emplea en los medios de comunicación masivos). Al eliminar el acento propio se obtienen numerosas ventajas, tales como la accesibilidad a mejores empleos, un mejor estatus sociológico, mejores opciones de vida. En la BBC jamás permitirían que una persona con un working class accent tipludo y gangoso hablara frente a un micrófono, más bien la mandarían a escribir las noticias, en el mejor de los casos. En este país, la aplicación de dicha política perjudicaría gravemente a los noticieros de Televisa y TV Azteca, pues casi no habría reporteros, pero las salas de redacción estarían sobrepobladas.

En fin, si uno quiere acceder a niveles superiores, se deben eliminar los rastros que puedan delatar el lugar de procedencia. Esto no sólo lograría evitar el encasillamiento y la discriminación, sino que provocaría la admiración de los otros por el simple hecho de dominar un idioma totalmente ajeno. Hace unos días tuve la oportunidad de entablar conversa con una mujer de Frankfurt y, para mi alegría, no sólo me dijo que tenía un buen nivel de lengua, sino que también poseía una ventaja muy rara en sí misma, la carencia de acento al hablar en su idioma. Esto no significa que hay que imitar un acento totalmente fuera del contexto personal, pues la única forma de adquirirlo sería viviendo en un entorno en el que predominara, sino que hay que hacer lo posible por eliminar los rasgos de la lengua materna al hablar en otro idioma. En este ámbito la fonética juega un papel crucial, pues eso define el grado en el que se podrá dominar una lengua. Basta con poner un poco de atención y saber hacer las distinciones. No es algo imposible

jueves, 4 de junio de 2009

Traum(-a)

It was the scoop of an oddly grayish day. I never heard who or what news agency had gotten it first, though. Some kind of pulse had altered the ocean flow all over the globe, which produced several disasters in both ports and inlands. In other words, no city could be safe from this havoc. Mountains and highlands would have worked as the most proper shelters against this, but it happened so suddenly. A one thousand meters water barrier was rushing towards the city and, as the experts had calculated, outskirts and downtown would be drowned in two hours, three maybe.

Everyone thought the end of mankind would come quite soon. Thousands of people blocked the highways and nobody else could leave from that bucolic parade of stagnation. Only a few ones gave up any hope and decided to face their destiny at home. In a matter of minutes almost everyone had gotten off the streets. I could feel the crushing void as I headed to my favorite shrine, a Gothic church built by the English Catholic Community. I lit a candle just as I entered and crossed myself; the priest's sermon thundered through the dimly lit nave as only few faceless people paid him due heed. I couldn't help but thinking of the twisted irony when he spoke "and the Spirit of God moved upon the face of the waters". Waters. They were older than time and light. They had begotten life and today they would wipe it out and, probably, drag the remains of it to Norwegian shores. Two old ladies whispered that the deacon's nerves broke down and he joined the fleeing throng, leaving the priest on his own. In earlier years the father should have been a tall, sturdy man who worshipped God and all his saints and thanked him for his greatest work. Today, the loneliest man in the universe, bent by age and disease, stood before my eyes, in front of the altar. Once he produced his rosary from his pocket, he immediately focused on praying a series of Hail Marys and, since nobody was watching, I dared to go upstairs as far as I could.

I reached the roof and divined the vault upon me, then I looked down and heard the wind whistling through the trees as it swung their branches. This had nothing to do with God's will. Many things that happened before had nothing to do with it. It would just happen and that was everything I needed to know. Nobody I ever knew or I wanted to meet stood by my side. I strangely felt that the wave would come from the southwest and made my own conclusions. My head put the will to survive and the sane resignation together just in case I couldn't make it when I discovered a skyscrapper ten blocks away from the cathedral. I thanked God for giving me more hopes once again and walked the staircase down. I jumped down the last steps and immediately told the parishioners we could stand a chance if we reached the skyscrapper on time. None of them seemed to listen to me; they had surrendered to the things to come. I tried to talk the priest into telling the others about the possible shelter but he just kept praying. When I pulled him from his arm I couldn't move him at all, not even an inch. Though old and whithered he was still taller than me. He only needed one single deep stare to tell me he would not leave his herd. He had been forsaken before and he would never do that to somebody who needed him, even for saying prayers only. I turned my gaze and finally could see the people's faces. They were old, maybe as old as the priest or maybe even older. He kindly gave me his rosary and I understood I had to go.

I ran down the sidewalks but soon found out there were no cars driving by, so I stepped onto the road. The ground began to tremor and I knew I had to hurry. The wave probably had broken against the outskirts, crushing those crooked people who attempted to escape from the watery coffin this city would become. I had the purpose to tell the most of the people I ran into about the shelter but I could see no one in the streets. As I walked into the lobby I rushed to the lift, pressed the button but hesitated. I wouldn't make it to the top on time so I took the stairs. I climbed up as fast as I ever did. I managed to get to the next to last floor and looked out to the window. The streets were flooded so I shut the paine. For a momentI thought the building would yield to the great flow and saw that only the spires of the cathedral pointed towards the sky, just like fixed poles emerging from the deep. As I heard a greater wave that followed breaking against the building I hid away inside a closet. I still carried the rosary and held tight to it. I couldn't stand the noise of the roaring wave and, therefore, I covered my ears. I must have passed out for I remember nothing about what happened next.

I woke up by the sound of the blowing wind. I thought it was raining so I went to look outside. To my surprise it was not rain but thick drops falling from the leaves of the remaining trees the deluge spared. I went downstairs and outside the building and noticed everything was wet to the kern. I tried to find people but I could see nobody. I almost slipped on the pavement when I ran down the streets; no one came out. I called out anybody but got no answer. I entered people's houses but they showed no sign of survivors. Some rooms had been drenched and some others remained half-dry but, everytime I entered one the void sprang at me. I then ran to the church, hoping I could still find somebody there. The doors were torn apart and I looked up and down. Plentiful pieces of stained glass lied all over the floor. I realized that the parishioners and the priest were all gone as I noticed little crosses and beads mingled with water and scattered prayer's book pages. The pews next to the windows were totally destroyed. I turned my gaze upwards and it came across with the gloomy, tearful eyes of Jesus above the remaining altar. There was nothing to do in the church anymore so I went off. When I walked out my candle fell from one of the upper gutters.

The cloudy vault kept hanging on and the cold light of morning fell upon the remains of the city. Many edifications managed to survive and stayed on their place; even the oldest trees grabbed their roots to the deepest layer of the earth and remained there, but people had been eliminated from this town. The great flood washed them away and only God knows where they will appear, if ever. The waters managed to annihilate any trace of life but me. I couldn't understand the will that made me escape and I guess I never will. I was not sure if somebody else in the world was still out there but, Death had spared me by that moment. The watery echo of my footsteps resounded in the atmosphere as I restlessly kept running and hoped to find someone for, if the flood didn't destroy me, desolation would do it in the end. I was the loneliest man on earth and there was no one who could take that away from me.

martes, 2 de junio de 2009

Six

Comienza el sexto mes del año y mi incredulidad crece. Cuando este mes haya terminado el dos mil nueve fluirá rapidamente. Debo darme prisa con mis deberes para poder cerrar ciclos, pues pronto cumpliré un año de haber terminado la escuela. Aunque la verdad dudo mucho que, una vez que ya haya concluído con mis tareas,logre sentirme mejor o diferente. Quizá, cuando ya haya presentado el examen profesional y espere mi título, pasaré por un periodo de alegría que durará un par de semanas--lo mismo que duró cuando revisé mi historial académico al ver mis asignaturas aprobadas--o tal vez tres. Y, a menos que algo realmente fabulosos suceda volveré a mi decepción habitual.

Hay descubrimientos que más valdría jamás hacerlos, pues alteran profundamente la vida.

Still Life



Lyrics: Joakim Montelius